“somos estrellas del rock con
zapatillas de andar por casa”
Asistir a un concierto
de Corizonas es como asistir a una clase de buena música. Corizonas se ha
convertido en la banda del momento e ir a un concierto de su última gira antes
de darse un tiempo para sus propios proyectos (Arizona Baby y Los Coronas) es cita obligada en todo seguidor y amante del rock y el country americano.
Pero no nos pongamos tiquismiquis con
las etiquetas, porque esta banda no pertenece a ninguna y pertenece a todas.
Por unos momentos puedes sentirte como parte de una película de John Ford o una
de las bailarinas del Guateque de Peter Sellers.
Tuvimos la gran suerte
de conocerles en el BBK Live de este año en el mejor de los escenarios; un día
soleado en el monte. Puede que los integrantes de la banda creyesen que salir a
las cuatro de la tarde fuese algo malo, pero poder disfrutar de la energía que
desprende Javi Vielba, su cantante, o el desparpajo de Fernando Pardo, no sería
lo mismo a la llegada de la noche el último día de festival. Tanto para
nosotras como para muchos de los asistentes al BBK Live, Corizonas fue la gran
estrella de aquel día y el mejor descubrimiento de 2012.
Pero dejemos atrás los
días de verano para volver al presente o aun pasado no tan remoto como el del
día 8 de Diciembre cuando nos dirigimos a la Sala Santana de Bilbao con las
pilas cargadas para asistir a un concierto para no olvidar. Lo primero que nos
llamó la atención al entrar fue la edad media del ´publico que si bien la
primera media hora estaba en 40 años, poco a poco la media fue bajando dejando
claro que los jóvenes somos más de trasnochar y salir tarde de casa. La fluidez
del público y el buenrollismo que
hubo durante todo el concierto dio pie a que
se pudiera bailar sin sentir que te quedabas sin espacio vital.
No se hicieron mucho
de rogar y en cuanto se apagaron todas las luces y en la pantalla apareció el
logo de Corizonas se hizo el silencio hasta que aparece Rubén Marrón coge su
guitarra acústica y nos lleva de viaje, un viaje dónde nos vamos encontrando a
los diferentes integrantes del grupo que se unen también y nos dejamos llevar
hasta el final de una Intro maravillosa que es sólo el principio de un
concierto que se nos hizo tan tremendamente corto que casi nos enfadamos cuando
Vielba dijo que “Piangi con me” esa pieza italiana tan hermosa, era la última y
fue entonces cuando nos dimos cuenta de que ya habían pasado dos horas.
Es imposible escoger el
mejor momento porque fueron demasiados y hacer una crónica de cada minuto sería
imposible por la falta de espacio, pero haciendo un pequeño recopilatorio
resumen…
- - Las coreografías de David Krahe y Javi Vacas (que es una versión de Jared Padalecki si no se recortara las patillas el pelo) no dejaron descanso a mi sonrisa que incluso llegó a quejarse del gran sobreesfuerzo que estaba haciendo aquella noche.
- - La camisa y la chaqueta de Vielba (puede que sea un apunte muy superficial, pero eran lo más)
- - El gran parecido que le sacamos al trompetista y al hombre de negro del Hormiguero. No porque lleven las mismas gafas, si no porque cada vez que le mirábamos no sonreía.
- - Vielba y Loza con la batería. Brutal. Lo cual como dice Fernando, demuestro que Vielba tiene mucho más para dar, lo cual nos alegra a todos.
- - El momento guateque con las imágenes perfectas que daban ganas de darse laca al pelo y ponerse unas bambas para bailar.
- - Los piques anecdóticos entre Pardo y Vielba y su primer encuentro en Valladolid.
- - Que Vielba saltara fuera del escenario y se pusiera a cantar con el público como uno más.
- - Que el bis que se pidió cuando se despidieron diera pie a seis canciones más.
Y como no lo mejor de
las canciones versionadas que atesoraron Arizona
Baby y Los Coronas en los tiempos de Dos
bandas y un destino, por ahí sonaron Neil
Young “Everybody knows
this is nowhere”, Black
Sabbath “Supernaut”, The Rokes “Piange con me” Pink Floyd “Wish you where here” su pequeña oda a la amistad. Leiber/Stoller “Poison Ivy” castellanizado a “Hiedra venenosa”, Electric Six “ Danger! High Voltaje”
Supongo que algo malo
pudo haber y quizá es mi éxtasis de fan
metida de lleno en el concierto no lo notase, pero de momento no es
idílico.
- Lady S
Corresponsal en el Norte
Fotos: María Braun
2 comentarios:
Estuve en Donosti y repetí siete días mas tarde en Bilbo. Con eso creo que lo digo todo. Sois unos máquinas!!
A este paso va a haber que sacarse un bono familiar. En cuanto se acercan a tierras norteñas...allá que vamos.
¡El mejor desestresante!
Sonrisa puesta de continuo, los pies, las piernucas, todas las visagras se menean sin permiso. Y encima, aquí en Bolueta, la música de la salita aledaña para seguir y seguir.
Muchísimas gracias a todos, chicos.
Ir a veros es como estar en casa.
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